Melina Bretillot es una motociclista de 25 años, nacida en San Juan. Referente nacional, campeona argentina de MX Córdoba y del Transmontaña Rally Enduro mixtos, cuyo próximo objetivo es el Latinoamericano Femenino de Motocross, del 9 al 11 de septiembre, en Toluca, México.
Es hábil con la moto tanto en enduro como en el cross, pero confiesa que prefiere la competencia del MX ya que no le gusta las “sorpresas”.
Para competir, “prefiero el motocross porque tiene más entusiasmo. Tenés la posibilidad de estudiar la pista, las curva, las líneas, los saltos; lo disfruto mucho y sabés qué lo que te espera”, confió Bretillot a Via San Juan.
Y comparó: “El enduro, en cambio, me causa estrés porque tenés que resolver más en el momento y no sabés qué te vas a encontrar. Es un deporte de sorpresas constantes. Tenés que estar súper enfocada”.
Un legado recibido
La joven talentosa creció arriba de una moto. Contó que de pequeña sus padres le inculcaron la pasión por este deporte, “principalmente mi mamá”.
“Mi mamá fue quien comenzó con las motos. Es una apasionada que contagió a mi papá. Ella fue quien nos inculcó este deporte. De hecho a mí no me gustaba. Yo era muy miedosa y delicada, me gustaba jugar con muñecas. Si me caía de la moto, me decía ‘volvete a subir y la arrancás’. No quería saber nada”, explicó.
Y luego dijo: “Hoy le agradezco porque me enseñó a ser una mujer súper independiente, en todos los ámbitos”.
Detallando sobre sus comienzos, profundizó en su infancia y recordó: “A mis padres les gustaba salir al campo los domingo, a comer un asado. En aquella época, tenía 4 años y mi hermano Arturo, 3. Ellos nos llevaban en la moto, en la parte de adelante. Y de regreso nos metían en una mochila porque nos quedaban dormidos”, sostuvo la única mujer quien además tiene otro hermano, Leonel de 13.
“Mi primera moto fue una Beta 50, que tenía que compartir con Arturo, pero sirvió para el inicio”, agregó sobre sus inicios.
El trazado de su camino
La endurista, que se prepara para su primer Latinoamericano de motocrocross, se define como una deportista sumamente organizada “porque mientras menos tiempo tenés, más planificás. Por mi trabajo tengo sólo la siesta para entrenar en bicicleta y gimnasio, dedicándole más a lo aeróbico y poder así rendir con mayor eficiencia en las carreras exigentes como la que se me aproxima”, confió.
Melina compitió por primera vez en una carrera en La Toma, a los 12 años. Luego se animó al Zafari de San Juan en 2012. Pero fue desde el 2014 donde fue en punta logrando podios: 2014, 2019 y 2018 subcampeona argentina, campeona en el Transmontaña de enduro en Tucumán y en el Provincial de Córdoba considerado Argentino por su ausencia en el calendario tras la pandemia.
En el 2016 tuvo un momento bisagra. Un impás que la hizo dudar en continuar con la actividad.
“Me lesioné y me negué a las motos. Me había comprado una nueva y no quería subirme. Me puse a practicar atletismo, natación y hasta corrí en un XTerra. Me fue tan bien que clasifiqué para el Mundial de Hawai, al que fui y quedé entre las 400 de la general (800). Fue una experiencia divina”, explicó la deportista.
Luego, en la previa de un campeonato en Córdoba en 2017, pudo más la adrenalina que le generaba las máquinas y volvió al ruedo.
Melina también tenía planes de correr en el Latinoamericano de Enduro, este fin de semana pero por problemas en la aduana no pudo viajar a Chile, sede del campeonato.
“Tenía toda la documentación presentada y me impidieron pasar la moto a último momento”, aseguró.
Por lo que el Latinoamericano Femenino de Motocross en México será su revancha. Será en Toluca, del 9 al 11 de septiembre.