Lo que parecía un ofrecimiento para recibir un préstamo bancario se transformó en una estafa que terminó con los pocos ahorros que Carlos Calvo tenía en su cuenta. Al anciano de 73 años le ofrecieron por Facebook un préstamo con muy buenas condiciones. Cayó en la trampa y por WhatsApp dio todos sus datos. Siguiendo las indicaciones de los estafadores, hasta transfirió sus ahorros a la cuenta de ellos, quedándose con las manos vacías.
Desde octubre del año pasado Calvo se instaló en San Juan. El hombre es de Buenos Aires pero se vino a la provincia a cambiar de vida. Desde el 2017 vive en un hotel de calle Estados Unidos. Le prometieron prestarle $30.000. Con ese dinero tenía pensando pagar unas deudas e instalarse definitivamente. Fue con esa ilusión que se metió en el préstamo. Fue así como cayó en la trampa, dándole al estafador su número de DNI, de cuenta bancaria (que tiene en el Superville), entre otros datos.
El vaciamiento de la cuenta fue realizada por el propio Calvo. Fue él quien en contacto telefónico con el estafador siguió los pasos que le indicaban y terminó transfiriendo su dinero a otra cuenta. Encima hasta le cargó crédito al supuesto prestamista.
Angustiado, el anciano habló con Diario de Cuyo. "Desde ese día estoy ido. Tengo una bronca tremenda. Me llaman los de los préstamos que pedí y los de las tarjetas con los que tengo deudas y les tengo que decir que no tengo nada, sólo una copia de la denuncia que hice en la Policía para que vean lo que me pasó", cerró.
La Policía investiga el hecho. Por el momento, se sabe que el dinero fue transferido a una cuenta en Tucumán a nombre de Cintia Guzmán. Intentarán recuperar la plata, pero le anticiparon que es muy complicado.