El lunes se festeja en todo el país el Día del Amigo y en San Juan la flexibilización de la cuarentena permitirá que cientos de grupos puedan juntarse a festejar. Los bares, cafés y restaurantes tienen permitido abrir sus puertas hasta la 1 de la madrugada y ya recibieron un aluvión de reservas para a fecha especial.
"Calculamos que las reservas ya están llegando a un 70% lo que es el lunes en la noche, y algunos están optando por apertura el lunes al mediodía. O sea que creemos que va a ser un día muy fructífero a pesar de ser no laborable para la gastronomía, no es muy normal el lunes", aseguró Rubén Miodosky, vicepresidente de la Cámara Gastronómica Hotelera de San Juan, a la radio Estación Claridad. En el sector hay una gran expectativa por recuperar los dos meses que estuvieron sin facturar.
"Creo que vamos a trabajar muy bien a pesar de la situación que se viene padeciendo, estamos trabajando al 40% de la capacidad de la gente por cuestiones de distanciamiento, por eso creo que habrá aperturas al mediodía, algunos en la tarde y el fuerte será la noche", expresó el representante de los gastronómicos. Pero no es sólo el Día del Amigo el que genera esperanza en los propietarios, sino que las reservas también están siendo solicitadas para el fin de semana. "Se viene muy cargadito, hay reservas por todos lados", comentó.
Las casas de familia son la otra alternativa que tienen los sanjuaninos para pasar el lunes. En las mismas se pueden hacer juntadas hasta las 12 de la noche y con la presencia de hasta 10 personas por vivienda. "No es fácil lo de la pandemia, se habilitó más gente en las casas de familia, hay que lograr que la gente vuelva a tener confianza y a salir y en eso estamos trabajando desde la gastronomía, que ofrecemos seguridad sanitaria para que salgan a comer tranquilos", dijo Miodosky sobre este tema.
Los bares trabajarán con el 40% de su capacidad ya que es lo establecido en el protocolo. El cubre bocas y el alcohol en gel son obligatorios y los turnos son de 1 hora y media. Las mesas están separadas a dos metros de distancia y no puede haber más de seis comensales en cada una de ellas. "Los números no nos van a dar igual pero la idea es tratar de trabajar bien a pesar de la mala situación de la gastronomía y ni hablar de la hotelería que está cerrada", concluyó.