Desde el 24 de abril, Sergio Luis Bustos estaba preso en su casa. La decisión había sido de un juez que le permitió quedarse en su vivienda de la Villa San José, en Jáchal, un distrito agrícola en el extremo norte de San Juan. Sin embargo, este lunes por la tarde lo encontraron paseando, según publicó Diario de Cuyo.
Bustos fue beneficiado con la domiciliaria por el riesgo de contagio de coronavirus pero no pudo respetar ni siquiera el encierro en su propia casa. El narco fue condenado en marzo del 2019 y cumplía condena. El condenado fue sorprendido por personal de la Seccional 21 y Gendarmería lo detuvo para trasladarlo al Servicio Penitenciario Provincial para que termine de cumplir la sentencia.
El narco fue condenado porque formaba parte de una banda narco que traficaba droga entre la Capital sanjuanina y Jáchal, de donde es oriundo. Se trató de un caso muy polémico porque la banda estaba intregrada por un gendarme, dos policías y 8 civiles. Entre estos últimos estaba Bustos.
El preso fue liberado en el marco de las prisiones domiciliarias que distintos jueces de todo el país están otorgando por la pandemia de coronavirus. De hecho, la seman pasada, los internos de la cárcel sanjuanina llevaron adelante un motín en el Penal y quemaron varios colchones. Como resultado de esa protesta uno de ellos terminó muerto y el otro muy grave, por las quemaduras. Ahora, Bustos deberá volver al Penal y el juez le revocó el beneficio que le había dado. El sujeto tenía una condena de 6 años por comercio de estupefacientes.
