Un padre y su hijo fueron liberados, en San Juan, este martes porque un tribunal consideró que su juicio estuvo plagado de "vicios y errores". Así publicó Diario de Cuyo, sobre el calvario que tuvieron que atravesar Juan Alberto Guerra y su hijo, Francisco Danilo Guerra, por una gresca, tras una discusión de tránsito. Los jueces Eugenio Barbera, Maxmiliano Blejman y Silvina Rosso de Balanza, consideraron la condena excesiva y ordenaron su inmediata liberación.
Todo se desencadenó el pasado 12 de mayo, en un semáforo ubicado en calles Meglioli e Ignacio de la Roza, en la localidad de Rivadavia, al oeste de la provincia de San Juan. Ese día los Guerra iban en moto al Hospital Marcial Quiroga porque Francisco estaba enfermo y se cruzaron en una discusión de tránsito con un grupo de ciclistas. La pelea verbal se fue a lo físico y padre e hijo terminaron a las piñas con Miguel Godoy (empleado del Poder Judicial de San Juan) y su amigo Darío Ramírez.
Producto de esa gresca uno de los dos ciclistas terminó con una fisura en su brazo porque lo habrían golpeado con el casco. Los Guerra fueron a juicio en el Fuero de Flagrancia y en una sola audiencia terminaron condenados a un año de prisión efectiva, a pesar de que ninguno de los dos tenía antecedentes penales. Los acusados, que deconocían por completo el sistema de juicios express, acordaron un juicio abreviado con su defensa y la fiscal Virginia Branca. Así los dos fueron al Servicio Penitenciario Provincial por un delito que podría haber terminado en un año de prisión en suspenso.
Los jueces de la Sala III de la Cámara Penal, revisaron el fallo y concluyeron que había errores y vicios de procesales y criticaron duramente la defensa por no haber dicho nada al respecto. Además cruzaron fuertemente al juez de Flagrancia, Ricardo Grossi Graffigna por haber aceptado el acuerdo sin interiorizarse correctamente sobre lo ocurrido. Los Guerra fueron liberados tras pasar cuatro meses presos, junto a peligrosos delincuentes.