Un nuevo hito se alcanzó en el sistema público de salud de Tucumán. Alberto, un hombre oriundo de Cañada Grande, Santa Fe, logró recuperarse tras un trasplante autólogo de Células Progenitoras Hematopoyéticas (CPH) realizado en el Hospital Néstor Kirchner, institución que continúa consolidándose como referencia nacional en tratamientos de alta complejidad.
La intervención fue posible gracias al lineamiento del gobernador Osvaldo Jaldo y al compromiso del Ministerio de Salud Pública, a cargo de Luis Medina Ruiz, que posicionaron a la provincia como un centro de referencia para pacientes de distintas provincias argentinas.
El camino hacia la recuperación
El paciente llegó a Tucumán el 15 de julio para iniciar un riguroso proceso de evaluación multidisciplinario. Posteriormente, el 30 de julio ingresó a internación, donde comenzó el tratamiento que finalmente culminó con éxito.
La doctora Flavia Figueroa, jefa del Departamento de Hemato-Oncología y Unidad de Trasplante UTCPH, explicó: “Estamos interconectados con otras unidades de trasplante de médula ósea públicas del país. Al estar dentro de esa red, comenzamos a recibir pedidos de evaluación de pacientes potencialmente candidatos a trasplante autólogos de distintas provincias, no solo limítrofes”.
Si bien el procedimiento presentó complicaciones esperables, Alberto logró superarlas de manera estable: “A medida que el paciente recuperó los glóbulos blancos, las plaquetas y los glóbulos rojos, fue resolviendo todo lo infeccioso. Tras su recuperación hematológica y clínica, Alberto inició la etapa de post-trasplante, con seguimiento ambulatorio en la provincia hasta poder realizar la contrarreferencia definitiva con su médico tratante en Santa Fe”, detalló la profesional.
Un esfuerzo colectivo
La doctora Figueroa resaltó el trabajo interdisciplinario que permite llevar adelante estos procedimientos complejos: “Interviene todo el equipo de hemato-oncología, pero con el sostén de áreas como hemoterapia, bioquímicos, farmacéuticas, diagnóstico por imágenes, odontología, limpieza, dirección, entre otros. Sin ellos no sería posible”.
La especialista también destacó el valor humano de cada alta médica: “Escuchar sus agradecimientos, ver su gratitud y muestras de afecto, nos motiva a seguir en el camino por el que comenzamos”.
Un alta cargada de emoción
El alta de Alberto fue celebrada con aplausos por parte de su familia y el personal de salud. El propio paciente, conmovido, expresó: “Mi corazón está aquí. Muchas gracias, los quiero mucho a todos”.
El Hospital Néstor Kirchner reafirma así su misión de brindar tratamientos de alta complejidad en el sistema público, garantizando equidad y calidad de atención para pacientes de toda la Argentina.