La semana pasada se dictó la primera sentencia de triple filiación en Salta. Se trata de la historia de un niño de dos años que vivía con su mamá y su papá afectivo, quien lo cuidó desde su nacimiento. Cuando la mujer falleció en septiembre del año pasado, el papá biológico presentó el ADN y exigió sus derechos. La jueza jueza en lo Civil de Personas y Familia de Orán, Ana María Carriquiry, convocó a ambos padres a una audiencia y ambas partes acordaron compartir la responsabilidad del pequeño.
“Convocamos a una audiencia donde se escuchó a ambos padres en presencia de un asesor de menores y de la Fiscalía a cargo de caso. En un acto de mucha madurez, ambos padres pidieron la triple filiación. Se dejó el machismo se lado y se pensó en multiplicar afecto”, explicó la jueza Carriquiry en una entrevista con Central Policial.
La sentencia de triple filiación acordó una custodia compartida del niños, que seguirá viviendo con su papá legal y tendrá un régimen de comunicación amplio con su progenitor. Además se sumará el apellido del padre biológico al del padre socio afectivo y al de la madre. “Hubo demasiada madurez de parte de los dos hombres”, destacó la magistrada.
En los dictámenes, la asesora de Incapaces, Gladys Reynoso y la fiscala civil Marcela de los Ángeles Fernández se pronunciaron a favor del reconocimiento de la triple filiación. La asesora solicitó también que se declare la inconstitucionalidad del artículo 558 del Código Civil y Comercial, que establece que una persona no podrá tener más de dos filiaciones parentales. La fiscala coincidió con este pedido, entendiendo que trasgrede los estándares vigentes en cuanto al interés superior del niño.