Este jueves, a las 20, familiares de Mario Condorí, el expolicía condenado por el femicidio de Cintia Fernández, se reunirán en la Plaza 9 de Julio, frente a la Catedral Basílica, para marchar y pedir por su liberación. Defienden su inocencia y sostienen que es un perejil de la causa.
Condorí fue a juicio en 2019 y condenado a 23 años de prisión luego de que el Tribunal lo encontrara responsable del crimen de quien fuera su pareja, Cintia Fernández. La joven fue asesinada en mayo de 2011 en un departamento del barrio Parque La Vega, en la zona sur de la ciudad, y a su cuerpo lo encontró su mamá cinco días después. Las pericias establecieron que la causa de la muerte fue asfixia por sofocación, y que además tenía golpes en la cabeza.
Según datos publicados por InformateSalta, de la marcha participarán familiares y amigos cercanos de Condorí, también su abogado defensor, y padres de otras víctimas. Todos sostienen que el hombre no mató a Cintia Fernández, y que detrás del caso hay otros responsables.
Condorí llegó a juicio en 2019 mientras cumplía prisión domiciliaria monitoreada electrónicamente. En su testimonio frente al Tribunal, el expolicía defendió su inocencia. “Yo no maté a Cintia. No tengo absolutamente nada que ver con su muerte”, aseguró en el banquillo de los acusados. Los jueces también lo condenaron a pagar seis millones de pesos, más los intereses correspondientes, a la madre de la víctima, Ana Fernández, en concepto de reparación integral del daño causado por el delito.