Este lunes comienza el juicio contra los acusados del femicidio de la joven Paola Álvarez ocurrido en mayo de 2017. El caso sacudió Salta ya que el principal acusado, Santiago Alfredo Zambrani, quien era pareja de la víctima, publicó mensajes de "desesperación" en las redes.
Entre los acusados, además del presunto autor material, se encuentran sus dos padres, quienes de acuerdo a la acusación, habrían prestado toda su colaboración para desaparecer el cuerpo y lograr impunidad.
Paola Álvarez desapareció el 5 de mayo de 2017, y apareció sin vida en agosto de ese año, al costado del camino de cornisa cerca del pueblo de La Caldera.
Para el fiscal Ramiro Ramos Ossorio, Santiago Zambrani elaboró el plan asesino cuyo móvil principal fue el despecho, ya que la joven rechazó formalizar una relación que solo tenia entidad para el imputado. Para la familia de la joven, podría haber "algo más", y sospechan que Álvarez quizá vio algo que "no debía".
El Caso
Para la fiscalía, en la noche del 5 de mayo de 2017 o la madrugada del 6, Santiago Zambrani resolvió quitarle la vida a Paola Álvarez. Para ello, mezcló una sustancia que provoca somnolencia con cerveza y se lo dio de beber a la víctima para poder quebrar su voluntad y evitar resistencia. Luego, la estranguló hasta apagar su vida.
Ramos Ossorio sostiene que para lograr la impunidad, Zambrani contó con la ayuda de sus padres, Amelia Inés Huergo y Alfredo Francisco Zambrani para deshacerse del cuerpo.
A su vez, fueron claves para la investigación el contenido de los celulares de los involucrados. Los investigadores pudieron analizar la cuenta de Facebook de Zambrani, en donde se despachó con mensajes desesperados que despertaron las primeras sospechas en su contra:
"Hoy he perdido a la persona que más amé en este mundo, no sé por qué ni cómo ahora todos me juzgan y me culpan, ya mi vida no tiene sentido. La encontraré allá arriba, por fin podré estar a tu lado sin importar lo que los otros piensen u opinen. Voy en tu búsqueda", decía uno de los mensajes.
El 17 de agosto a la altura del kilómetro 1.640 de la ruta 9, en una quebrada de difícil acceso los investigadores encontraron el cuerpo de Paola Álvarez, tres meses después de denunciada su desaparición.