Imputaron a Silvia Magno por realizar viajes sin autorización durante el aislamiento total en Salta. La empresaria está acusada del delito de violación a las medidas adoptadas por las autoridades competentes para impedir la introducción o propagación del coronavirus. Se abstuvo de declarar.
La Unidad de Delitos Económicos Complejos tomó intervención en el caso, a partir de las noticias que tomaron estado público y que indicaron que el pasado 9 de abril llegaron 40 estudiantes desde Córdoba. Los jóvenes habrían abonado $ 3.500 a la empresa de Silvia Magno -socia de la firma Flor Azul- por regresar a la provincia.
Al respecto, el secretario de Seguridad, Benjamín Cruz, aclaró que la autorización de los viajes de repatriados son dados por Nación e indicó que de parte de la Provincia, se activó el candado sanitario y de seguridad correspondiente.
Por otra parte, en la página web de la Comisión Nacional de Regulación de Transporte se constató que no hubo pedidos de autorizaciones por parte de Flor Azul SAS sobre viajes realizados los días 2 de abril a las 22:40, 9 de abril a las 09:35 y 10 de mayo a las 14:15, entre otros. Silvia Magno respondió que presentará su declaración por escrito a la fiscal Verónica Simesen.
