La semana pasada conocimos la historia Abril Harguindey Echeverria, la joven porteña que viajaba por Bolivia junto a su perrita y por la pandemia tuvo que dejarla en Salta porque no la dejaban seguir viaje con ella. Finalmente logró reecontrarse con ella gracias a la solidaridad de una gran cantidad de personas.
Abril contó su desventura en su cuenta de Facebook, donde también pidió ayuda para poder reencontrarse con su mascota. La joven mochilera viajaba por Bolivia cuando se decretó el aislamiento por el coronavirus. Desde el consulado de Argentina en ese país se ofrecieron a trasladarla hasta su ciudad pero cuando cruzaba la frontera en Aguas Blancas (Salta) le dijeron que no podía subir al colectivo con su perra.
Abril decidió no seguir viaje. Se negaba a dejar a su compañera de viaje pero horas más tarde no tuvo más remedio. "Zorrita", su perra, quedó al cuidado de una mujer llamada Celeste, que la cuidó y la llevó a una veterinaria para que haga un carnet sanitario que la habilite a viajar. A partir de ahí se dio una cadena de esfuerzos y de solidaridad que terminó en un feliz reencuentro.
Celeste llevó a "Zorrita" con Susana, la mujer que la acercó hasta la ruta, donde la buscó Raúl, quien luego la trasladó hasta el mercado central de Buenos Aires. Allí la esperaba el papá de Abril. El destino final de la perra fueron los brazos de su dueña.