Los fiscales penales Verónica Simesen y Pablo Rivero, informaron que en el marco de la investigación que sigue adelante por la desaparición del ciudadano francés Mathieu Martin, dispusieron que se realice una nueva incursión de búsqueda de sus restos en la zona de Puesto Huacaloma – Paraje Volcán Higueras, Iruya.
Las tareas estarán a cargo de personal de la División Homicidios y contará con la participación de perros entrenados en la búsqueda de restos humanos de la Policía Federal Argentina. También se contará con la colaboración de más de 20 efectivos de distintas áreas de la Policía de la Provincia.
El caso
Mathieu Martin se encontraba viajando de mochilero por el norte argentino cuando desapareció de la faz de la tierra. El último contacto de Martin con su familia fue un correo electrónico que les envió el 8 de agosto, en el que les decía que estaba en Tilcara y que planeaba partir hacia a Iruya, una localidad salteña cercana al límite con Jujuy.
Las autoridades dieron por desaparecido al mochilero el 27 de agosto, según contó su amigo Cristophe Grèzes en un comunicado que difundió por Facebook y Twitter. Desde entonces, se buscó a Matin en Jujuy y Salta.
La investigación por la desaparición del turista francés dio un giro cuando la policía detuvo a dos hombres, acusados de haberlo asesinado. Los sospechosos son Juan y Froilán Cuevas, quienes fueron imputados por homicidio simple. Al momento de la detención de los hombres, su hermana Rosa dio más detalles sobre la desaparición de Martin. Dijo que ellos sabían lo que habían hecho con el francés. "Lo empujaron en Chorro abajo", había denunciado la mujer.
Ante la declaración de Rosa, Froilán dejó de negar haber visto a Martin y cambió su declaración. "Juan lo apuñaló", lanzó. Con este argumento, la búsqueda un giro de 180 grados. Rosa luego agregó que ambos hermanos estaban ebrios y que en la casa, uno de ellos (al parecer Juan), tenía guardado un binocular y un teléfono celular, probablemente, del joven francés.
Los antecedentes de los acusados
Los acusados, Juan y Froilán Cuevas, tienen antecedentes y son hombres violentos. Hace diez años Juan mató a su cuñado de una puñalada y lo arrojó por un barranco. La Justicia salteña está investigando si ese homicidio existió. Froilán estuvo preso, acusado del asesinato de otro hombre. Pero no recibió condena. También se sabe que son alcohólicos crónicos.
La hipótesis del crimen
Desde la fiscalía afirmaron que Martin no usaba celular pero que se mantenía comunicado cada 10 o 15 días con su familia a través de Facebook o mail, tampoco utilizaba GPS, pero tenía experiencia en viajes. "La falta de contacto puede estar vinculado con el deceso. Si él estuviera vivo, hubiera informado dónde está", explicó el fiscal Ossorio. El último contacto con sus padres fue aproximadamente a mediados de agosto.
"Hay testimonios que lo ubican acampando con su carpa al lado de la casa de los hermanos Cuevas, en fecha aproximada 14 de agosto. Desde ese último contacto, nadie más lo volvió a ver", siguió el fiscal.
En la casa de la los Cuevas, se encontró una linterna, un cuchillo y un pantalón del mochilero escondidos bajo piedras. También rastros quemados de otras de sus pertenencias.