Ya son dos los testigos que se contradijeron en su testimonio durante el juicio contra Mario Condorí por el femicidio de Cintia Fernández. Ambos son agentes policiales.
El miércoles terminó detenida –y momentáneamente destituida de su cargo- la subcomisario Gimena Núñez, quien fue la primera en estar a cargo de la investigación y también fue la responsable del operativo en el lugar del hecho el día del hallazgo.
Este jueves prestó declaración el oficial Martín Alberto Flores Saravia, quien sucedió a Núñez en la investigación y en ese momento prestaba servicio en Seguridad Personal de la División de Homicidios, de la Brigada de Investigaciones.
Flores Saravia también incurrió en numerosas contradicciones y el representante del Ministerio Público solicitó la remisión de las actuaciones al fiscal de Derechos Humanos, por la posible comisión de un delito de orden público.
Entre otras cosas, el testigo declaró que sólo conocía al imputado por su intervención en la causa y aseguró no haber trabajado con él en la División Homicidios ni en la División de Trata de Personas. Precisó que lo vio por primera vez en la Alcaidía, en el marco de un procedimiento, cuando el imputado ya estaba detenido por el homicidio de Cintia Fernández.