La Justicia provincial le puso punto final a la investigación de la denuncia sobre una estafa de 42.000 pesos a un taxista que viajó de Rosario a Retiro. El pasajero se declaró culpable este jueves y acordó pagar 60.000 pesos como parte de una condena de ejecución condicional.
El Ministerio Público de la Acusación (MPA) confirmó que Gonzalo Oviedo recibió una pena de un año y medio de prisión en suspenso. De esta forma accede a salir en libertad después de un mes tras las rejas por la causa que se abrió cuando lo arrestaron en los Tribunales provinciales.
Además de la reparación económica al taxista, el pasajero se comprometió a cumplir diferentes reglas de conducta durante dos años. Durante ese período, el imputado tiene prohibido comunicarse con la víctima o acercarse a 300 metros de distancia. Tampoco podrá portar armas blancas o de fuego, incluso réplicas. Además debe abstenerse de consumir drogas o abusar de bebidas alcohólicas.
Oviedo fue detenido el martes 14 de junio en el edificio de Balcarce y Pellegrini, donde ingresó después del viaje con la excusa de que iba a buscar el dinero para pagarle el precio acordado en Buenos Aires. De acuerdo a la investigación, se cambió de ropa adentro para evitar que el chofer lo encontrara, pero finalmente la policía lo atrapó.
El conductor de la empresa City Taxi aceptó el viaje a cambio de 35.000 pesos y las autoridades calculan que perdió $ 7.000 más por la estafa. Finalmente, el pasajero aceptó su responsabilidad penal en un procedimiento abreviado que homologó la jueza María Trinidad Chiabrera.
Oviedo no sólo se declaró culpable por la estafa al chofer. También lo condenaron por encubrimiento agravado, ya que un mes antes la policía lo encontró a bordo de un auto robado. Durante el procedimiento en el estacionamiento del Hipermercado Libertad, detectaron que el coche tenía la patente de otro vehículo sustraído.