Un aberrante hecho ocurrió en noviembre de 2020, cuando una mujer de 33 años intentó matar a su propio hijo prendiéndolo fuego en barrio Triángulo de Rosario. Este jueves, la Justicia finalmente falló y la condenó a 11 años de prisión por el hecho.
La decisión fue tomada por el tribunal integrado por los jueces Gustavo Pérez Urrechu, Paula Álvarez y Paola Aguirre, que encontraron a la madre culpable de haber rociado alcohol al pequeño de 11 años para luego arrojarle una vela encendida.
En ese momento, la mujer llevó a su hijo al hospital y sostuvo que el niño de nombre Alexis se había quemado en un accidente, mientras jugaba con los elementos inflamables. Pero más tarde, el nene le confesó a su abuela que había sido su mamá quien lo había atacado.
La familiar extendió la denuncia a la Comisaría de la Mujer y contó que su hija había intentado prender fuego a su nieto, algo que los hermanitos de la víctima corroboraron y que no pasó a mayores gracias al auxilio de vecinos. Además, aportó información sobre otras situaciones de maltrato de la progenitora. Con esto, la Policía tuvo suficiente para arrestar a la mujer y llevarla ante la Justicia.
¿QUé sucedió con el niño luego de ser atacado por su madre?
Tras quedar en llamas, el chico llegó al Hospital Víctor J. Vilela con su madre y su abuela, aquejado de quemaduras en la zona del pecho y abdomen, mientras la vivienda en la que vivían se prendía fuego.
Luego de la confesión de Alexis, el fiscal Adrián Spelta, de la Unidad de Homicidios Dolosos, imputó por el hecho a la mujer, identificada como Nélida B., y el juez de primera instancia Nicolás Foppiani dictó la prisión preventiva efectiva por el plazo de ley haciendo lugar al pedido de la Fiscalía.