Desesperación y terror: esas tres palabras no llegan a describir lo que vivió un rosarino tras ser víctima de una balacera el domingos 4 de junio al noroeste de la ciudad. Con seis disparos, cayó a una zanja y gracias a esto pudo sobrevivir.
Aquel día, Pablo había salido a pasear a sus perros en horas de la tarde, cuando en la calle Campbell y avenida Génova fue baleado por dos personas. Según denunció, no había motivo para este violento episodio ya que “no tiene problemas con nadie”.
Así lo relató para El Tres: “Viene por Cullen una moto negra, dejo que pase, y sin decirme nada sacan el revólver y escucho disparos. Yo caigo y me siguen disparando. Me caí en una zanja honda. Si me hubiese caído en el piso me hubiesen matado porque vaciaron el cargador”.
Sobrevivió a una balacera: el relato de la víctima
“Ahí tirado empecé a gritar ‘auxilio, auxilio’, sentía un bloqueo en mi cuerpo, no podía moverlo. Sólo me agarraba de los yuyos y empezó a arrimarse gente. Yo sentía que lo único que quería era estar con mi familia”, recordó.
El rosarino, de 45 años, insistió en que desconoce el motivo de tan brutal ataque desarrollado aquel domingo en pleno día: “Me da mucha bronca e impotencia porque nunca tuve problemas con nadie, siempre trabajé”.
Una de las balas le dio en la columna, por lo que aún no puede caminar. En total fueron cinco impactos entre tórax, abdomen y pelvis. “Uno dio en el celular, que lo tenía en el pantalón, y cinco en el cuerpo. A mi perra le dieron dos tiros pero está bien”, cerró.