La intendenta Mónica Fein ratificó este jueves la postura del Ejecutivo a la hora de analizar el eventual desembarco de Uber y advirtió que esa decisión abriría la puerta a "un sistema donde el Estado pierde la regulación y el control y el control".
Horas antes de abordar la cuestión trascendió que la empresa dueña de la aplicación ya tiene 3 mil personas inscriptas para trabajar en la ciudad a pesar de que no está habilitado. En vez de promover una reforma de la normativa vigente al respecto, la funcionaria respondió que "el sistema de taxis debe ir mejorando" para satisfacer la demanda local.
"Hoy tenemos un servicio que tiene sus dificultades y siempre estamos trabajando para que esté cada vez más unido a los nuevos tiempos", comentó la ex diputada nacional. Entre las recientes medidas que tomó el Ejecutivo al respecto, destacó la posibilidad de tener "georreferenciada la totalidad de la flota" de autos con licencia y la de denunciar problemas en la prestación a través del 147.
La dirigente socialista ponderó que actualmente "el Estado participa activamente en varios procesos vinculados a la seguridad" que proveen los taxis. "Hay que ser muy cuidadoso en la protección de los pasajeros", concluyó en referencia a la falta de controles que implica habilitar Uber en las calles rosarinas.