Cristian Lombardo conducía un micro interurbano de Rosario Bus a la madrugada, cuando un delincuente se subió y le clavó un destornillador en la pierna para robarle, provocándole la rotura de ligamentos cruzados. Debió ser operado y debe rehabilitarse de aquella lesión, pero la empresa se desentendió, tan sólo lo envió a que un médico particular que lo revise y frenó gestiones para que la ART le pague el sueldo y gastos médicos.
El asalto ocurrió en abril a bordo del Expreso. "Saben que en los interurbanos llevamos dinero en efectivo y como no tenemos custodia ni hay policías en la calle, nos asaltan con facilidad", relató Lombardo a Vía Rosario. Tras el ataque, Rosario Bus lo envió a un médico clínico de Tucumán y Balcarce.
"Me miraba cada 15 días, me daba calmantes y me decía que no tenía nada, pero yo me había hecho una resonancia que detallaba el grado de mi lesión", dijo Lombardo que ahí empezó a sospechar que algo raro ocurría. Investigando descubrió que la firma contaba con la ART Interracción, y empezó a tratarse en el Sanatorio Delta.
Poco después esa firma de ART quebró y fue absorbida por Federación Patronal. "A todo esto desde la empresa siempre nos ocultaron la existencia de la ART, y como nunca firmaron que era empleado de Rosario Bus, no me cubrieron los gastos médicos ni el sueldo después de los tres meses", explicó.
Lombardo dijo que hay 120 choferes de las líneas interurbanas y 500 de las urbanas de Rosario Bus que están en esa situación. "Hay compañeros que han tenido cáncer y en vez de darle un año como marca la ley, a los cuatro meses los pusieron a trabajar porque de lo contrario no cobraban", reveló.
Agregó que a los que están de licencia, tienen menos de cinco años en la empresa y no cuentan con hijos, les pagan sólo tres meses, mientras que los que llevan más tiempo o cuentan con gente a cargo los aumentan a seis.
“Según la ley laboral la cobertura debería ser por un año en el que nos cubran los gastos médicos, nos paguen un proporcional de horas extras, viáticos y sueldos, pero acá hacen lo que quieren”, se quejó y añadió que ya presentó una demanda al respecto.
Mientras tanto espera en su casa a recuperarse del violento asalto del que fue víctima en su lugar de trabajo, sin cobrar sueldo y teniendo que pagarse los costos médicos.