Rosalía Jara: a casi un año de su desaparición, las pericias no complican al único imputado

Desde la Fiscalía no logran probar la participación del profesor de educación física, el único sospechoso. El joven está detenido desde julio del año pasado.

Rosalía Jara: a casi un año de su desaparición, las pericias no complican al único imputado
El imputado sigue detenido pero en la Fiscalía no logran pruebas contundentes\u002E (Archivo)

La búsqueda de Rosalía Jara en el norte provincial continúa y, en paralelo, también la investigación que tiene como principal apuntado a Juan Valdéz, el único imputado en la desaparición de la joven. En los últimos días se dieron a conocer algunas pericias que no complican al muchacho, quien está detenido desde julio del año pasado.

Según el medio Reconquista.com.ar, los fiscales y querellantes están convencidos de que Valdéz es el culpable de la desaparición de la chica. Para ellos, el joven tenía una relación amorosa con Rosalía de la que fue fruto Alma. Esto generaban inconvenientes entre ellos ya que el joven se negaba a hacerse cargo de la criatura.

Una de las cartas que manejan los investigadores es que Rosalía hace la última llamada desde el teléfono del imputado en la noche de la desaparición. Minutos después el teléfono dejó de tener actividad. Otra de las pruebas fundamentales es la marca que hacen los perros sobre el auto de Valdéz.

Pero en los últimos días, las pericias arrojaron resultados que no complican al único sospechoso en la causa. Los pelos encontrados en el campo y los secuestrados en el auto de Valdéz no se corresponden con el perfil genético de Alma, la hija de Rosalía, y la geolocalización del teléfono solo permite saber que en la última comunicación Rosalía estaba en la garita (donde se la vio por última vez) y Juan Valdéz estaba cerca del bar. Nada más.

Valdéz se encuentra detenido desde el 20 de julio del año pasado. A casi un año de ese momento, no hubo avances en la investigación ya que las pruebas no incriminan al imputado.

Rosalía Jara fue vista por última vez en una garita de la ruta 83 luego de haberse retirado de un bar de la zona en la noche del 1 de julio del año pasado. Desde ese entonces, su desaparición no solo conmovió a la pequeña localidad sino también a toda la provincia.