A finales de julio Lionel Messi sorprendió a todos por aparecer en una foto teñido de rubio, y manteniendo la barba colorada que había tenido en la Copa América.
El astro rosarino explicó poco después que ese look era una forma de sacarse la mufa tras una nueva derrota en la final del certamen continental de selecciones. Algo así como empezar de cero de nuevo.
Poco más de cinco meses duró ese look, ya que en el encuentro que este domingo el Barcelona jugó ante el Espanyol la Pulga volvió a aparecer con pelo negro.