Los distribuidores de panificados para la cadena Bimbo aseguraron que unas 30 personas que operan en la ciudad podrían quedarse sin trabajo ante la decisión de la empresa de controlar la cartera de clientes que posee cada uno de los repartidores.
Debido a la situación, los trabajadores iniciaron una protesta este miércoles para pedir que la firma les permita continuar con su modalidad actual. De lo contrario, afirman que la compañía les asignará una zona de cobertura y eso pone en peligro sus ingresos y su actividad.
Los repartidores indicaron que el conflicto tiene antecedentes en Córdoba y Buenos Aires, donde ya se registraron alrededor de 60 despidos.