El ex jefe policial detenido este martes, Rafael Grau, contrató a uno de los abogados más caros del país para que lo defienda. Se trata del mediático Miguel Ángel Pierri, quien ofició de letrado en resonantes casos nacionales.
A mediados de los '90, Pierri colaboró en la defensa del ex presidente, Carlos Menem, en la causa por tráfico de armas a Ecuador y Croacia.
Ya en los 2000 representó a la familia del cantante Rodrigo, que demandó al conductor de la camioneta que se accidentó, el empresario Alfredo Pesquera. Y años después prestó asistencia legal al cura Julio César Grassi.
También defendió a Silvio Soldán en la causa que se le había iniciado a su ex pareja, Giselle Rímolo, que decía ser médica. Fue abogado del barrabrava de Boca, Rafael Di Zeo y de la viuda de una de las víctimas del triple crimen, Sebastián Forza.
Por último, trabajó con Jorge Mangeri, el portero condenado por el crimen de Ángeles Rawson. De su defensa se recuerda el exabrupto de su hijo, que en medio de un programa televisivo confesó que Mangeri asesinó a la menor.
Grau está acusado de simular el envío de patrulleros para que sean reparados y ploteados, servicios por los cuales se le asignaban partidas presupuestarias.