Nuevos focos de incendio se desatan en el delta del río Paraná, a la altura de la localidad santafesina de San Lorenzo, donde una decena de voluntarios trabajó en el lugar intentando apagar el fuego, y piden mayor presencia del Estado para combatir las quemas.
La zona más afectada por las quemas en las islas entrerrianas se encuentra frente a San Lorenzo, donde el fuego avanza sobre la vegetación y peligran viviendas de algunos isleños. En consecuencia, kayakistas de San Lorenzo que notaron el fuego desde la costa, se lanzaron al agua en sus botes, para ayudar a combatir los incendios.
No obstante, los voluntarios advierten que no es suficiente su esfuerzo, y piden que el Estado reúna mayor cantidad de especialistas y recursos, ya que en este momento solo hay un helicóptero hidrante, y cinco rescatistas que trabajan ininterrumpidamente combatiendo las llamas.
De esta forma, desde temprano se pudo observar cómo diez jóvenes combatían el fuego con palos, rastrillos y hasta remeras, sin indumentaria de protección y desprovistos de elementos de primeros auxilios en caso de necesitarlos.
Días atrás, militantes del grupo ambientalista El Paraná no se Toca fotografiaron y denunciaron terrenos que semanas atrás se encontraban azotados por el fuego, pero que actualmente cuentan con maquinaria agrícola trabajando, para el acondicionamiento del lugar para ganadería y cultivo.