Un joven de 23 años falleció este martes a la noche como resultado de un ataque a balazos en la zona noroeste de Rosario. De esta manera se confirmó el tercer crimen en la ciudad en menos de 24 horas luego de la muerte de un adolescente en zona oeste y el robo de automóvil en el que mataron al cocinero Sebastián Cejas.
Fuentes del Ministerio Público de la Acusación (MPA) informaron que la víctima fue trasladada por un vecino hasta el Hospital Alberdi. Luego de que el personal de guardia constatara el deceso, trascendió que el homicidio ocurrió en inmediaciones de Empalme Graneros, a un par de cuadras del lugar donde donde hace dos semanas asesinaron a una chica de 17 años.
De acuerdo a la versión preliminar, el muchacho se encontraba con otras personas sobre Cabal al 1300 bis cuando fueron interceptados por un segundo grupo no identificado. La primera hipótesis que asomó en torno al caso se refiere a un enfrentamiento en el lugar, el cual terminó con la vida de Diego Nicolás Miranda.
Por la mañana, el organismo judicial reportó que otro joven de 26 años había ingresado después del supuesto tiroteo al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca). A partir de las primeras medidas adoptadas por la fiscal Gisela Paolicelli, el paciente quedó detenido por su probable participación en el asesinato. En cuanto a su estado de salud, precisaron que se encontraba estable luego de recibir un disparo en su pierna izquierda.
A partir de este asesinato en la zona cercana al arroyo Ludueña, en el departamento Rosario ya se cometieron 152 homicidios en lo que va del año. El total acumulado es superior al del mismo período de 2019 y la brecha se agrandó en septiembre con 23 crímenes, lo que implica un promedio de una víctima fatal por día.