Este sábado se cumplió una semana de la confirmación del femicidio en Berabevú y la familia de Julieta Del Pino salió a la calle junto a cientos de personas para pedir justicia por el crimen. Durante el acto organizado junto con la marcha, la madre de la joven aseguró desconsolada: "La siento en casa pero no la puedo ver, solamente la siento".
Con el "corazón en la mano", Fabiana Morón habló en la plaza del pueblo y recordó a su hija antes de la movilización que cosechó el apoyo de habitantes de varias localidades vecinas. Allí agradeció el respaldo e insistió: "Les pido por favor a las mamás, a las adolescentes que no me abandonen".
Acompañada por su esposo y su hijo menor, la mamá de Julieta encabezó una movilización que comenzó alrededor de las 14.30 en medio de aplausos y el grito repetido de "justicia". La procesión siguió el camino previo a la desaparición de la muchacha el viernes 28 de julio, cuando salió de trabajar en un kiosco y fue interceptada antes de llegar a su casa.
Hasta el momento, el Ministerio Público de la Acusación (MPA) imputó a Cristian Romero (28) por el femicidio. El joven que también vive en el pueblo es amigo y compañero de trabajo del hijo mayor de los Del Pino. Los fiscales aseguran que el detenido y la víctima habían mantenido una relación, aunque presumen que la misma ya había terminado antes del asesinato.