La subsecretaria de Salud de Rosario, Silvia Marmiroli, informó este martes que cayeron entre 60 y 70 por ciento las consultas en efectores municipales en medio de la pandemia de coronavirus. Dadas las medidas para evitar el contagio de COVID-19 también se redujo el nivel de ocupación de camas del sector público.
Respecto de la atención en centros de nivel primario y hospitales ante la llegada del invierno, la funcionaria ponderó que diagnostican "muy pocas" patologías respiratorias. A su vez, dentro de las situaciones abordadas es bajo el porcentaje que requiere internación.
En diálogo con Canal 3, la integrante de la cartera sanitaria subrayó que la caída es mayor en cuanto a los casos de niños. Buena parte de ellos reciben tratamiento por bronquiolitis y después vienen otras enfermedades de menor incidencia.
Marmiroli consideró que la disminución de la demanda "seguramente" está relacionada al uso obligatorio de barbijo por el COVID-19. A esto añadió el adelanto de la campaña de vacunación antigripal y la búsqueda activa de población de riesgo desde los diferentes efectores.
Entre otros factores, la subsecretaria de Salud reconoció que la suspensión de clases presenciales juega a favor junto con el resto de las medidas de distanciamiento social, preventivo y obligatorio. En cuanto al futuro inmediato, comentó que vienen realizando pruebas para definir las "estrategias de salida" después de la cuarentena. Evitar aglomeraciones y fomentar que los pacientes no tengan que salir para ver especialistas son algunas de las alternativas que evalúan sostener de aquí en más.