Dos niños vivieron una noche de terror cuando quedaron encerrados en el vehículo de su padre que se había ido al boliche. La policía los rescató al encontrarlos llorando y sin la presencia de un mayor.
La insólita situación se vivió en Capitán Bermúdez. Los uniformados informaron que en la zona de avenida San Lorenzo y La Pampa escucharon la alarma de una camioneta sonar.
Eran las 5.30 y en el interior de una Volkswagen Amarok había dos menores edad que no paraban de llorar, alterados por la situación.
Los policías ingresaron al boliche que estaba en las inmediaciones del lugar y solicitaron la presencia del dueño del vehículo. El pedido se repitió varias veces por los parlantas pero nadie apareció.
Ante este escenario, los niños de siete y tres años fueron llevado al hospital donde constataron que no presentaban lesiones y luego quedaron bajo el cuidado de los uniformados en la seccional policial hasta que se presentó el hombre buscado que, según trascendió, es propietario de una reconocida empresa de comestibles con sede en Villa Gobernador Gálvez.