El caso conmocionó a la provincia cuando el 4 de junio, la camioneta en la que volvía Verónica Tottis (44) a su casa en Las Varillas luego de visitar a sus padres en Jesús María, fuera encontrada totalmente calcinada a la vera de la Ruta Provincial Nº13, en cercanías a la localidad de Luque.
Si bien las primeras informaciones daban cuenta de un accidente de tránsito, apenas llegaron las autoridades judiciales, notaron que se había tratado de un homicidio. Con el pasar de las horas, el propio esposo de la mujer, Julio Saluzzo (45) quedó en el centro de la escena, señalado como el principal sospechoso del crimen de la mujer.
Saluzzo desde el 8 de junio está detenido en el penal de Bouwer, y hace días la Justicia confirmó la prisión preventiva, sin que sus abogados defensores se opusieran.
En la cárcel, el reconocido apadrinador, realiza distintas actividades como herrero, mientras que sus abogados señalan que su cliente "tiene buena conducta y presta colaboración cada vez que alguien lo requiere". No recibe visitas, ya que por el protocolo sanitario no están permitidas por el avance de la pandemia.
Los hijos de la pareja, de 18, 14 y 5 años, siguen en Las Varillas, hasta tanto de defina el tema de su cuidado.
Saluzzo está acusado de homicidio doblemente agravado: por el vínculo y por violencia de género, por lo que podría llegar a ser condenado a prisión perpetua.
La familia de la víctima sostiene que el hombre no actuó solo, por lo que se solicitó la ampliación de testimoniales. Sospechan que existió colaboración de algún allegado a Saluzzo.
Después de tres meses del crimen, todavía no se conocen las causas de la muerte de Tottis. Se presume que fue asesinada y luego incinerada, pero el resultado de la autopsia aún no está.