El embarazo adolescente sigue aumentando en varias provincias argentinas, entre ellas las de la región NEA. Distintas organizaciones lanzaron una campaña de prevención. Los indicadores más altos son de las provincias del Norte: Formosa (21,7%), Chaco (20,4%), Misiones (19,9%), Santiago del Estero (18,8%), Corrientes (18,3%) y Salta (18,3%).
Según las últimas cifras oficiales, cada día nacen en el país 258 bebés de madres menores de 19 años. Es el 13,6% del total de los nacimientos. Y 2.493 (0,4%) son bebés que parieron niñas de entre 10 y 14 años, niñas abusadas. Los peores indicadores son de las provincias del Norte, como Formosa (21,7%), Chaco (20,4%), Misiones (19,9%), Santiago del Estero (18,8%), Corrientes (18,3%) y Salta (18,3%), que tienen los porcentajes más altos En Chaco, Formosa y Misiones, uno de cada cuatro nacimientos es de una adolescente.
Para abordar la problemática y visibilizarla, se diseñó el Día de Prevención del Embarazo no Planificado en la Adolescencia, una iniciativa que surgió en Uruguay en 2003 y que en 2007 se impulsó a nivel global como “World Contraception Day”. En Argentina, la Fundación para el Estudio y la Investigación de la Mujer (FEIM) trabaja desde hace cinco años con Unicef en la Campaña de Prevención del Embarazo no Planificado en la Adolescencia. En esta quinta edición, se realiza con otras nueve organizaciones: la Red Nacional de Jóvenes y Adolescentes para la Salud Sexual y Reproductiva (RedNac), Amnistía Internacional Argentina, FUSA Asociación Civil, el Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA), Fundación Huésped, Fundación Kaleidos, Las Otras Voces, Intercambios y Doncel.
El hashtag de campaña, #PuedoDecidir, hace foco en la posibilidad de que las y los adolescentes tomen decisiones en relación a su sexualidad, y que demanden la aplicación de la Educación Sexual Integral (ESI) en las escuelas. “En el caso de las menores de 15 años se observa que no disminuyen, tendencia preocupante porque además se acompaña de la disminución de la edad en que experimentan la maternidad. Sabemos que ser madre a esa edad temprana es un precedente para que a los 18 años ya tengan 3 o más hijos -opina Mabel Bianco, al frente de FEIM-. Al riesgo de la salud biológica para la madre y el hijo que implica esta maternidad precoz, nos debe preocupar lo que significa para la salud psicosocial y económica. A esa edad, las niñas deben jugar, estudiar y hacer las cosas que la mayoría de las niñas hacen".
Estadísticas oficiales del país aseguran que siete de cada diez embarazos en la adolescencia no son buscados ni planificados, y que muchos ocurren en situaciones de abusos. Según las Estadísticas Vitales de 2017 -de la Dirección de Estadística e Información de Salud (DEIS)- ese año nacieron 94.079 niños de embarazos de adolescentes de 10 a 19 años, lo que implica una reducción del 20% en relación a los registrados el año anterior (99.324) y lo configura como el valor más bajo de la década. Pero en el grupo de 10 a 14 años (niñas), aumentaron los nacimientos.
Fuente: La Nación