Dos de los signados por fiscalía como organizadores de una asociación ilícita para beneficiarse del juego clandestino podrán continuar el proceso judicial teniendo salidas laborales. Se trata de Marcelo Uberti y de Julio Perona (hermano de David), quienes debieron pagar millonarias cifras para el beneficio: en conjunto, $4.500.000.
En el caso de Uberti, la decisión corrió por cuenta del camarista Matías Drivet (quien fuera funcionario del Ministerio de Seguridad durante la gestión del socialismo). Si bien no se conocen los fundamentos, la defensa de quien ahora seguirá el proceso judicial desde su vivienda se sostenía en que había colaborado con la investigación, en calidad de arrepentido. Se estima que esto posibilitó que 5 Jefes de Policía (Juan Pablo Bengoechea, Fabián Esteban Forni y José Alberto Pérez; y también Javier Gorosito y Flavio Aranda) tres de ellos, como Jefes de la URV) fueran detenidos, condición que aún sostienen.
De acuerdo a versiones periodísticas, Uberti debió pagar una fianza de $2.500.000. Además, tiene ciertas condiciones favorables, dado que puede salir para trabajar o para ir del médico.
En el caso de Julio Perona, la decisión la tomó el Juez Javier Bottero. Al igual que Uberti, podrá salir a trabajar, dentro de un horario establecido por el empleador. En este caso, debió abonar $2.000.000 como fianza. En este caso, ya contaba de la prisión domiciliaria.
Ambos (Perona y Uberti) tienen el mismo abogado, Pablo Mosconi.
De esta manera, de todos los que habían sido detenidos, solamente sigue preso Guillermo Miglietto.
