El Instituto de Investigación de la Cadena Láctea de Rafaela, que depende tanto del CONICET como del INTA, mostró su “preocupación” a través de un comunicado respecto de las graves consecuencias que puede traer los potenciales recortes que se haría desde la administración de Javier Milei a este área.
Todo comenzó a partir del comunicado del Directorio del CONICET del 16 de enero, “en el cual decide posponer la publicación de los resultados de la convocatoria a Becas y Promociones de la Carrera de Investigador Científico y Técnico (CICyT) hasta tanto se configure el presupuesto definitivo para el corriente año, y encomienda al Presidente del CONICET arbitrar los medios para realizar las gestiones que permitan obtener las adecuaciones necesarias al presupuesto”. Vale destacar que, hasta ahora, tendría el mismo presupuesto que en 2023. Es decir, un poder adquisitivo disminuido en lo que fue la inflación del año pasado: un 211,4%.
Destacan que la falta de actualización del Presupuesto, “atentaría contra el normal desarrollo de investigaciones en curso, como los estudios básicos sobre enfermedades de interés pecuario que colaboran en el desarrollo de nuevas medidas de control o profilaxis, la selección de cultivares forrajeros adaptados a nuestra región, el desarrollo de insumos nacionales que mejoren la conservación de forrajes, el biocontrol de plagas agrícolas, la generación y aplicación de nuevas técnicas diagnósticas enfocadas en la salud animal o la evaluación de los impactos de la producción lechera sobre el ambiente y el estudio de medidas de mitigación”.
