En la mañana de este martes, se reunieron los concejales de la ciudad con funcionarios del Ejecutivo, para analizar el proyecto de ordenanza en donde se propone multiplicar por 4 el valor actual del boleto del transporte público de pasajeros, pasando de $300 a $1200.
Por parte del DEM estuvo el secretario de Gobierno y Modernización, Germán Bottero; Juan Pablo Aversa, subsecretario de Servicios Públicos y Ambiente y Alejandra Barberis, coordinadora de la secretaría de Obras Públicas y Ambiente. Entre los puntos más destacados, se encuentra que el sistema aún no encuentra su equilibrio con esta importantísima suba.
Es que, de acuerdo a lo manifestado, de acuerdo a la fórmula polinómica de la actual ordenanza (que, dicho sea de paso, en la anterior gestión no se aplicó casi nunca y por lo tanto, el valor del boleto quedó atrasadísimo), se pasara de $300 a $438. Pero claro, con una base muy atrasada en sus costos. Por eso, en el proyecto de ordenanza, se modifica también la fórmula polinómica. Aplicando esta, el valor pasaría a ser de $831. Pero, de acuerdo a los cálculos del DEM, el valor del boleto para que haya un equilibrio entre los ingresos y los egresos debería ser de $2200. Con lo cual, pasarlo a $1200 haría que casi haya un subsidio municipal del 45.45%.
A su turno, el bloque de concejales de la oposición, anticiparon que presentarían un proyecto de ordenanza para que el boleto tuviera un aumento, pero con un límite: $1000. Podría tomarse como base la nueva fórmula polinómica, por ejemplo.
Lo cierto es que el sistema siempre fue deficitario y el sistema político siempre estuvo de acuerdo con que sea así, porque en Rafaela, el sistema público de pasajeros tiene casi un fin social: apenas paga el boleto pleno 1 de cada 4 pasajeros. El resto, tiene algún beneficio (jubilados o boleto educativo gratuito, por ejemplo). Pero tampoco se aprovecha esta crisis como si fuera una oportunidad: nadie (ni oficialismo ni oposición) plantea una readecuación del sistema. Algo que siempre, siempre, aparece en tiempos de campaña. Tampoco, cómo se va a hacer frente a la quita de los subsidios nacionales, que ha llevado casi al quiebre del sistema.
Sobre esto, el intendente Leonardo Viotti se manifestó en redes sociales, apoyando las críticas vertidas por el gobernador Maximiliano Pullaro, el lunes, en San Vicente, a la Nación, por no solo no enviar fondos al interior, sino aumentarlos al AMBA.