Como consecuencia de las altas temperaturas sostenidas en nuestra región, el Hospital “Dr. Jaime Ferré” ha observado un aumento en las picaduras de alacranes, especialmente en niños de entre 1 y 12 años. En la Guardia Pediátrica del hospital, se registran entre tres y cuatro casos diarios, aproximadamente.
El fenómeno está vinculado al incremento en la movilidad de los alacranes durante los días de calor, lo que provoca que estos arácnidos busquen refugio en los hogares, generando más picaduras. Estas últimas ocurren principalmente en los hogares, durante la noche, entre las 21:00 y 22:00 horas, y afectan comúnmente las extremidades, como brazos y piernas, en especial en la habitación de descanso.
Los alacranes prefieren lugares oscuros, fríos y húmedos, por lo que es importante revisar todos los objetos que se encuentren a nivel del suelo.
Procedimiento médico y seguimiento
Cuando un niño es atendido por picadura de alacrán en la Guardia Pediátrica, se realiza una evaluación inicial para determinar su estado general y se monitorean los síntomas relacionados con el veneno.
En la mayoría de los casos, los pacientes permanecen en observación durante un período de 4 a 6 horas. Si no se presentan síntomas, no es necesaria intervención adicional, solo se aconseja seguir las medidas preventivas en el hogar para evitar nuevas picaduras.
Sin embargo, cuando se detectan síntomas específicos, como vómitos, dolor intenso, ardor en la zona afectada o enrojecimiento, se requiere atención especializada. En esos casos, se recurre al suero anti-alacrán y otros tratamientos, según lo que precise cada paciente.
Medidas preventivas
Se recomienda tomar diversas precauciones en los domicilios particulares para evitar las picaduras. Es fundamental revisar y limpiar lugares oscuros y húmedos, no dejar ropa ni zapatos en el suelo, y evitar la acumulación de escombros o residuos en el exterior.
Además, es crucial inspeccionar especialmente las áreas a nivel del piso y mantener las habitaciones de descanso libres de objetos que puedan ser utilizados como escondites de alacranes. Dado que las picaduras ocurren principalmente durante la noche, es necesario ser más cauteloso en ese horario.
Acudir a la guardia
Aunque la mayoría de los alacranes encontrados en los domicilios de nuestra región son venenosos, no todas las picaduras provocan efectos graves. Sin embargo, es importante estar atentos a los síntomas.
En adultos, las picaduras suelen generar efectos leves, como ardor y dolor, sin consecuencias graves. Sin embargo, se recomienda que los adultos mayores, especialmente aquellos con condiciones preexistentes como diabetes o hipertensión, acudan a la guardia para un control, ya que pueden ser más vulnerables a complicaciones.
El Hospital reitera que es importante que tanto adultos como niños sigan las medidas preventivas y busquen atención médica en caso de duda.