Jonatan Fabián Werlen, de 23 años, había concertado una cita, cerca del autódromo, en agosto de 2018 a una mujer. Supuestamente, se llevaría a cabo una compra-venta de zapatillas. Pero terminó ocurriendo una violación y un intento de femicidio. Y para acentuar el horror: el hijo de ella presenció todo. En las últimas horas, la jueza Cristina Fortunato homologó un juicio abreviado, en donde el acusado aceptó la culpa, la víctima estuvo de acuerdo y recibió 10 años de condena.
Gustavo Bumaguín, de la Sección Especial de Violencia de Género, Familiar y Sexual (Gefas) de la Unidad Fiscal Rafaela, fue el fiscal de la causa y relató lo sucedido: "Werlen fue condenado como autor penalmente responsable de los delitos de tentativa de homicidio calificado (por criminis causae y por violencia de género); abuso sexual con acceso carnal calificado (por el uso de arma); privación ilegítima de la libertad calificada (por el uso de violencia y amenazas); robo calificado (por el uso de arma); y coacciones calificadas (por el uso de arma)".
El hecho ocurrió el martes 7 de agosto de 2018, alrededor de las 15 en cercanías del autódromo "Ciudad de Rafaela. El fiscal explicó que "el condenado llegó al lugar en moto, previo acordar un encuentro con una mujer a través de las redes sociales para venderle un par de zapatillas. Por su parte, la víctima también llegó en una moto junto a su hijo -menor de edad- y el condenado les pidió engañosamente que lo siguieran por una zona rural".
"Al arribar al lugar indicado, Werlen sujetó con un cuchillo en la garganta al menor, al mismo tiempo que los amenazó de muerte y les exigió que caminaran. De esa manera, el condenado condujo a las víctimas hacia uno árboles y pastizales que separan dos predios rurales", relató.
"Al adentrarse en el camino rural, Werlen le sustrajo a la mujer su teléfono celular. Luego, le exigió que ate a su hijo a un árbol con un cable que llevaba entre sus ropas. Todo ello bajo amenazas de matar al menor y exhibiendo el cuchillo que llevaba", informó el fiscal.
"Seguidamente, condujo a la mujer unos 15 metros más dentro de la misma línea de arboleda y pastizales, y le exigió que se quitara sus prendas de vestir bajo amenaza de matar a su hijo", indicó Bumaguín. El funcionario del MPA agregó que "ante la negativa de la víctima, Werlen procedió a quitarle la ropa contra su voluntad, al mismo tiempo que le profería golpes de puño en su rostro y en la cabeza. Luego de ello, el condenado abusó sexualmente de la víctima mientras continuaba golpeándola".
El funcionario del MPA manifestó que "minutos después, el niño logró liberarse y, ante esta situación, corrió en busca de ayuda. Antes de que arriben las fuerzas policiales al lugar, Werlen apuñaló a la víctima en el lado izquierdo de su cuello dejándola inconsciente".
"Lo hizo teniendo conocimiento del peligro para la vida y voluntad en relación al resultado mortal, y queriendo procurar su impunidad", argumentó el fiscal. "Después, Werlen le pisó el estómago y la garganta a la víctima, no produciéndose su deceso por causas ajenas a la voluntad del ahora condenado y en virtud de que su hijo logró escapar para pedir auxilio y dar conocimiento a la Policía", precisó.
"Seguidamente, Werlen se dio a la fuga con los elementos sustraídos previamente".
Finalmente, el fiscal subrayó que "todos los hechos se le atribuyeron en un claro contexto de violencia de género, evidenciando una desigualdad de poder entre las partes, que encuadraría dentro de lo normado por la Ley Nº 26.485 de Protección Integral para prevenir, sancionar y erradicar las violencias contra las mujeres".