Deberá continuar detenido en la cárcel de Saavedra un hombre que fue condenado a 7 años de cárcel por abusar sexualmente de una menor.
Tiempo atrás Alejandro Fabián Ursino había solicitado la posibilidad de continuar cumpliendo la pena mediante la modalidad de arresto domiciliario, señalando la necesidad de poder cuidar y asistir a sus padres.
El pedido fue denegado por el juez del Tribunal en lo Criminal Nº 1, Christian Alberto Yesari, y posteriormente confirmado por la Cámara Penal de nuestra ciudad.
La Sala II, con los votos de los jueces Guillermo Petersen y Guillermo Emir Rodríguez, rechazó el planteo del defensor Ramón Ernesto De Dios.
Los magistrados determinaron en la resolución que “las circunstancias valoradas resultan suficientes” para denegar la petición.
Oportunamente, el letrado que representa a Ursino consideró que los padres del procesado sufren padecimientos que implican limitaciones al normal desarrollo de su vida, por lo que reclamó el beneficio.
“La situación familiar alegada no se erige en circunstancia excepcional tal que amerite el dictado de la morigeración pretendida”, refirieron los camaristas.
Precisamente, destacaron que un informe de un médico forense de la Asesoría Pericial Departamental estableció que “aún cuando la madre se encuentra parcialmente limitada para las tareas habituales en función de su limitada movilidad, el padre no presenta limitaciones físicas para la vida diaria, por lo que cabe inferir que las necesidades que podría presentar la primera en razón de sus problemas de salud se encuentran satisfechas”.
Esto, según indicaron, fue complementado por un estudio socioambiental realizado en el domicilio por otro profesional.
Por todo ello, los jueces manifestaron que “en virtud de las razones meritadas corresponde confirmar el rechazo a la solicitud de la morigeración en favor del imputado”.
Los hechos
El 5 de diciembre de 2023 el juez Christian Yesari sentenció a Ursino por el delito de abuso sexual gravemente ultrajante.
Para el magistrado quedó acreditado que, entre 2012 y 2013, en la ciudad de Punta Alta, el imputado sometió en diferentes oportunidades a una menor que tenía 10 años de edad al comienzo de los ultrajes.
Según el fallo, el sujeto aprovechaba los momentos en los que quedaba a solas con la niña para manosearla.
Uno de los elementos valorados por el juez en la resolución fue el testimonio de la víctima. La menor relató que le contó lo ocurrido a una amiga, quien la acompañó para revelarle lo sucedido a sus padres y hermanos.
Fuente: LaNueva
