Una joven de Posadas vivió un episodio de acoso mientras realizaba compras en un conocido supermercado de Posadas. Según lo informado, un joven con campera negra y jeans la siguió entre las góndolas con actitudes sospechosas, situación detectada a través de las cámaras de seguridad del establecimiento.
El incidente ocurrió el pasado 19 de noviembre, cerca del horario de cierre del comercio. Fue una empleada quien advirtió a la clienta sobre el comportamiento del sujeto, informándole que aparentemente estaba tomando fotografías. Sin embargo, el personal solo emitió una alerta dirigida a la víctima, sin tomar medidas inmediatas contra el sospechoso.
El acosador se retiró del lugar tras ser descubierto, aunque permaneció en el acceso principal del comercio antes de marcharse. Este episodio dejó a la joven en un estado de alerta constante, quien expresó su preocupación al sentirse desprotegida, tanto dentro como fuera del supermercado.
Días después, la joven constató que el mismo individuo habría acosado a otras clientas. Ante la falta de acción por parte del comercio, decidió solicitar las grabaciones de las cámaras de seguridad y radicar la denuncia en la Dirección de Cibercrimen.
El material fue clave para confirmar el patrón de conducta del acosador, quien continuó frecuentando el lugar y replicando el hostigamiento. Aunque el equipo de seguridad del supermercado llegó a interrogar al joven y revisó su teléfono móvil, no se encontraron pruebas directas en ese momento. Según los relatos, el sospechoso justificó su conducta mencionando que padecía una adicción a la pornografía y que estaba en tratamiento.
Actualmente, el caso se encuentra en proceso judicial, y la joven espera que se tomen medidas efectivas para identificar y sancionar al responsable. Este episodio evidencia la necesidad de protocolos más sólidos en espacios públicos para garantizar la seguridad de los clientes y prevenir situaciones similares en el futuro.