Con los ajustes económicos, el consumo masivo acumuló una caída de hasta un 5% según informó la consultora Deloitte. Sin embargo, el e-commerce sigue siendo la excepción. La facturación en Argentina en 2016 creció un 51% respecto a 2015 y en 2017 un 52% con respecto a 2016, finalizando en 2017 con una facturación de 156.300 millones de pesos. Lo que prevalece es revisar productos en Internet y comprar en la tienda física o viceversa, esto se conoce como omnicommerce.
Dentro de Latinoamérica, Argentina es uno de los países con mayor tradición en comercio electrónico. De acuerdo con el estudio anual de la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (Cace), 9 de cada 10 adultos argentinos conectados a la web compró online alguna vez, el 50% compró alguna vez en los últimos seis meses.
Al momento de elegir una tienda online, los cuatro ejes más importantes para los argentinos son los precios, los medios de pago, la logística y las promociones bancarias. El 84% de la población que compra por Internet buscan descuentos, ofertas y aseguran tener conciencia del precio. El 54% busca la tienda que ofrezca el servicio más rápido posible. El comercio electrónico en Argentina representa alrededor del 2% de las ventas minoristas totales, cuando en países de Europa o América del Norte supera el 5%. Según publicó El Territorio.