La historia de Lucas Benvenuto está cargada de dolor. El joven que hoy tiene 32 años atravesó varias situaciones de abuso sexual en su niñez y adolescencia, pero la que más trascendió fue la que tuvo como victimario al conductor y músico Jey Mammon.

La prescripción del hecho no le dio a Benvenuto la Justicia que perseguía. No obstante, el humorista le inició un juicio por calumnias e injurias y, en esta instancia, el joven ganó. Es decir, quedó determinado por la Justicia que, aunque el caso haya prescrito, Lucas no mintió.
Benvenuto eligió Ushuaia para cambiar su vida, donde se dedica a dar clases de patinaje artístico sobre hielo. Pero en las últimas horas hizo público un hecho que lo pone en una situación incómoda y lo vuelve a revictimizar.
Qué le pasó a Lucas Benvenuto en Ushuaia
“¿Qué pensarías si te enteraras de que, después de 5 años de haber hecho felices a decenas de niños patinando, unas pocas mamis a las cuales no se las dejó manipular este deporte a su antojo decidieran que por haber sido un sobreviviente, por haber sido -en palabras más claras- un niño abusado, yo no puedo trabajar con niños? Además de pedir una evaluación psicológica", arranca crudamente el texto que compartió en redes sociales.
Y en ese marco recuerda “la cantidad de pericias psicológicas” que pasó para demostrar a la Justicia que “pese al gran daño que había sufrido de niño” es una “persona normal”.
“¡Soy más que mi historia! Es increíble que les esté contando esto. Me revictimiza nuevamente, además del gran impacto y daño económico a mi persona. ¿Que pensarías si se roban tu trabajo y, además de eso, te injurian por todos lados de una forma tan cruel, ruin y desesperada... Sobre todo desesperada por arruinar mi profesión y persona", escribió Lucas, acompañado de un emoji que hace referencia a la Justicia, lo que todo indica que tomara cartas legales en el asunto.