Roberto Cachanovsky le respondió a Milei: “Me preocupa que la sociedad acompañe a un desquiciado que con poder puede ser muy peligroso”

Javier Milei utilizó la palabra “mogólico” como insulto para referirse al reconocido economista.

Roberto Cachanovsky le respondió a Milei: “Me preocupa que la sociedad acompañe a un desquiciado que con poder puede ser muy peligroso”
Roberto Cachanosky y Javier Milei tuvieron un duro cruce

El candidato a presidente de La Libertad Avanza fue protagonista de un nuevo video viral. Allí se lo escucha utilizar el término “mogólico” como un insulto dirigido a Roberto Cachanosky.

A partir de esto, la Asociación de Síndrome de Down de la República Argentina (ASDRA), emitió un comunicado en el que repudió sus palabras y las calificó de “discriminatorias”.

En una entrevista radial, Cachanosky decidió responder los dichos de Javier Milei: “Una persona sin límites en la boca y con violencia, después en el poder puede ser violento con otras características”.

“Usar la palabra mogólico como insulto hoy, me parece que es muy desubicado, sabiendo que hay muchas familias con hijos con esta condición”, aseguró.

“Yo soy un liberal clásico, en el tema económico, pero ligado a lo institucional, con reglas que tiene que tener una sociedad. él se manda y dice cualquier cosa”, sentenció y agregó: “Pero lo más violento es haber creado un grupo de seguidores que son tan o más violentos que él”.

“Cualquier periodista que le pregunta algo que no le gusta, le dice que es un ensobrado”, afirmó Cachanosky.

El economista confesó que ambos tenían una relación muy cercana: “El me llamaba los sábados a la tarde a mi casa y le decía, si vos querés ser una influencia para los chicos, comportate”.

“Lo primero que tiene que tener un liberal es tolerancia a lo que opina el otro”, explicó y amplió: “Yo tengo audios que no voy a dar a la luz, donde la palabra mogólico la usa todo el tiempo, no es que se le escapó, la usa”.

“¿Vos te acordás cuando estuvo en Salta?”, pregunta Cachanosky haciendo referencia al episodio en el cual Javier Milei trató de “burra” a una periodista. Y sumó: “Yo y algunos más dijimos que el comentario de la periodista tenía sentido y como no lo defendimos a él, a mi me llegaron audios con todo un rosario de insultos”.

“¿Te imaginas a alguien en poder si reacciona con esa violencia? ¿Si tiene que decidir algo más importante que hace?”, preguntó preocupado.

Qué le dijo Javier Milei a Cachanosky

En el video, que fue difundido por la periodista Viviana Canosa en el canal La Nación+, el candidato a la presidencia, quien aspira a suceder a Alberto Fernández en la Casa Rosada, insultó al economista liberal llamándolo “mogólico, imbécil y tarado” al cuestionar su postura en la “batalla cultural”.

Luego, continuó con una serie de insultos: “Uno tiene que escuchar al pelotudo del dinosaurio, envidioso, resentido, con síndrome de Procusto, decir cómo son o no deben ser las formas, ¿por qué no te vas a la concha de tu madre? Si vos cuando tuviste todo el aparato a favor en lugar de hacer crecer al liberalismo lo convertiste en una vergüenza, hijo de puta”.

El comunicado de la Asociación de Síndrome de Down contra Milei

La Asociación de Síndrome de Down de la República Argentina (ASDRA) publicó un comunicado a partir de estos hechos que tomaron relevancia en las redes sociales.

Allí aseguran que “la utilización de la palabra mogólico u otras relacionados como insulto es discriminatoria” y explicaron que el término tiene su origen en “las primeras descripciones médicas que se hicieron acerca de las personas con síndrome de Down, debido a la forma habitual de los ojos de quienes tienen esta condición”.

“El término suele usarse para insultar haciendo referencia a la falta de inteligencia de la persona a la cual se dirige. Es decir, sitúa a los individuos en parámetros de normalidad-anormalidad y entiende a la discapacidad intelectual como algo fuera de lo normal, incorrecto u objeto de burla”, agregó la entidad.

Frente a los dichos de Milei, la Asociación difundió un video perteneciente a su campaña “Insultos”, publicada en 2010, con la que planteó que el empleo del término “mogólico” constituye en sí mismo un acto de discriminación y no un insulto, tal como lo han expresado personas con síndrome de Down y sus familias.