La presión opositora dio sus frutos en la Cámara de Diputados: Juntos por el Cambio llegó a un acuerdo con el oficialismo para destrabar la cuestionada ley de alquileres, que se debatirá desde el próximo martes durante un mes.
El consenso se logró tras una serie de contactos entre el presidente de la Cámara baja, Sergio Massa, el jefe del bloque oficialista, Germán Martínez, y los líderes de Juntos por el Cambio, que habían pedido una sesión para el mismo 5 de abril con el objetivo de derogar la ley.
El interbloque decidió dar de baja esa sesión, consciente de las dificultades para reunir el quórum de 129 y luego los dos tercios de los votos para habilitar el tratamiento de los proyectos sobre tablas, ya que no cuentan con dictamen de comisión.
A cambio de ese gesto, lograron que el oficialismo active la Comisión de Legislación General, que hasta diciembre era presidida por la massista Cecilia Moreau. La comisión se constituirá el martes y luego iniciará el tratamiento de los múltiples proyectos por un plazo de 30 días hábiles.
Si bien Massa había anticipado el último viernes que pretendían suspender la ley actual mientras transcurriera el debate, la norma seguirá vigente. En Juntos por el Cambio habían advertido que una suspensión implicaba “una gran inseguridad jurídica”.
Durante los 30 días, los diputados recibirán a representantes de inquilinos e inmobiliarias para escuchar propuestas. Los proyectos presentados van desde la derogación lisa y llana hasta propuestas de modificaciones, con diferentes grados de intervención estatal.
“Este problema acuciante para inquilinos y propietarios será de exclusivo tratamiento de la Comisión de Legislación General, que recibirá a los distintos actores para escuchar las iniciativas y sugerencias tendientes a mejorar la legislación actual”, se informó.
Si no se logra firmar un dictamen en el lapso de 30 días hábiles, Juntos por el Cambio se comprometió a elevar la presión y reimpulsar el pedido de sesión especial. Es que la reforma de la ley de alquileres fue una de las principales propuestas de campaña de la alianza.
El acuerdo se selló luego de que Massa convocara a “una Moncloa argentina”, pero en la oposición moderaron las expectativas y aclararon que el pacto por ahora alcanza solo a la Comisión de Legislación General, que es la que tratará exclusivamente la cuestión de los alquileres.
De todos modos, hubo un gesto no menor: la comunicación del acuerdo se realizó en conjunto desde las cuentas de Twitter de la Cámara de Diputados y del jefe del bloque radical, Mario Negri, a la misma hora.
Por otra parte, en el Interbloque Federal, que preside Alejandro “Topo” Rodríguez, habían enviado mensajes hacia ambos lados: reclamaron al oficialismo que constituya las comisiones, y a Juntos por el Cambio, que ampliara el temario de la sesión especial con otros proyectos.
Los diputados de la bancada exigían incorporar proyectos de cero impuesto a las Ganancias para pymes, reducción gradual de retenciones al agro y boleta única de papel, a cambio de dar quórum. “No somos furgón de cola del Frente de Todos ni de Juntos por el Cambio”, habían avisado.