La Rosada tantea a bloques dialoguistas por la reforma electoral en medio de un enojo de Pichetto

Francos se reunirá esta semana con jefes del PRO, la UCR y Hacemos Coalición Federal por el proyecto que buscaría eliminar las PASO. En el medio se desató una pelea inesperada por la Bicameral de Inteligencia.

La Rosada tantea a bloques dialoguistas por la reforma electoral en medio de un enojo de Pichetto

La Casa Rosada comenzó a tantear el terreno con los bloques dialoguistas para acelerar en el Congreso la reforma política, una de las grandes ambiciones del presidente Javier Milei en el marco del armado electoral de La Libertad Avanza para el año próximo. El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se reunirá esta semana con jefes del PRO, la UCR y Hacemos Coalición Federal con vistas a realizar un primer sondeo y renovar el apoyo político de sus aliados post Ley Bases.

El Congreso ingresó este lunes en receso invernal, pero ya hubo movimientos para que la reunión se concrete, posiblemente, este jueves en Casa de Gobierno. El presidente del bloque de diputados libertarios, Gabriel Bornoroni, contactó a algunos legisladores para darle forma al encuentro, aunque la previa está marcada por un cortocircuito con una de las bancadas, la que encabeza Miguel Pichetto.

En Hacemos hay un fuerte enojo porque el presidente de la Cámara baja, Martín Menem, los dejó afuera de la estratégica Comisión Bicameral de Fiscalización de los Organismos y Actividades de Inteligencia, donde el bloque pretendía un lugar para Emilio Monzó.

El enojo de Pichetto

El lunes pasado, Menem firmó la resolución para proponer como integrantes a Bornoroni y César Treffinger por La Libertad Avanza, Cristian Ritondo por el PRO y Mariela Coletta por la UCR. Pero Pichetto rechaza que el oficialismo se quede con dos casilleros y no haya ninguno para su bloque, que ayudó sin descanso para la sanción de la Ley Bases. Reclaman que se respete el criterio de un “acuerdo parlamentario” y aseguran que hay antecedentes en esa dirección.

El jefe del bloque Hacemos Coalición Federal, Miguel Pichetto (Foto: Federico López Claro)
El jefe del bloque Hacemos Coalición Federal, Miguel Pichetto (Foto: Federico López Claro)

El rionegrino le transmitió su malestar a Menem el jueves pasado, en una reunión caliente de la que también participaron Monzó y sus pares Nicolás Massot y Oscar Agost Carreño. No hubo acuerdo y este lunes a las 16.30 volverán a verse las caras. En Hacemos amenazan con no participar de la cumbre por la reforma electoral si el presidente de la Cámara no les ofrece una solución, como abrir una negociación por otras bicamerales. Tampoco hay demasiados ánimos para ir a la Rosada: intentan que el encuentro se traslade al Congreso.

En la Bicameral de Inteligencia, que es el eje de la disputa, el Senado ya nombró a sus representantes, y el oficialismo cedió todos los lugares: no tendrá ninguno. Formarán parte de la bicameral Martín Goerling (PRO), Martín Lousteau (UCR), Edgardo Kueider (Unidad Federal), Edith Terenzi (Cambio Federal) y los kirchneristas Eduardo “Wado” De Pedro, Oscar Parrilli y Florencia López. Unión por la Patria fue el último en enviar sus nombres.

Como sea, el Gobierno quiere tentar a los dialoguistas para que lo acompañen en la cruzada de la reforma electoral, que enfrenta un escenario cuesta arriba en el Congreso: en el grueso del PRO, la UCR y Hacemos no hay voluntad de eliminar las PASO (Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias) ni tampoco de recortar el financiamiento público de los partidos políticos. Son dos de los ejes del proyecto que el Poder Ejecutivo enviará al Congreso. En los últimos días, Pichetto se manifestó a favor de “dejar sin efecto” las PASO pero aclaró que su posición era a título personal.

Paralelamente, hay otras dos reformas electorales que le interesan a la Casa Rosada: la boleta única de papel, que está lista para ser votada en el Senado; y la “ficha limpia” para que acusados por corrupción no puedan ser candidatos a cargos electivos. Esta última iniciativa comenzará a ser tratada en un plenario informativo de comisiones tras el receso invernal, el 6 de agosto. La BUP, en tanto, aún no tiene fecha de tratamiento y la vicepresidenta Victoria Villarruel podría conceder cambios a bloques provinciales para garantizarse la aprobación, que obligaría al retorno del proyecto a Diputados.