Antes de las PASO, era un hecho que Javier Milei tenía todo para crecer en el Congreso Nacional. Lo que ninguna encuesta avizoró es que el candidato libertario pegaría un salto verdaderamente descomunal: de repetirse en octubre los resultados de las primarias, La Libertad Avanza pasaría a tener un bloque de 40 diputados y desembarcaría en el Senado con nada menos que ocho representantes.
Milei crecería de manera exponencial en un Parlamento donde ninguna fuerza política tendría quórum propio. El escenario de tercios vaticinado por la vicepresidenta Cristina Kirchner provocaría que en la Cámara de Diputados las dos principales fuerzas pierdan volumen por el ascenso del libertario.
Según un relevamiento propio, en la Cámara de Diputados (donde se necesitan 129 votos) Juntos por el Cambio pasaría a la delantera y se convertiría en la primera minoría con 106 diputados, mientras que el actual Frente de Todos (ahora Unión por la Patria) quedaría con 94. La primera fuerza perdería 10 bancas respecto de su representación actual, y la segunda, 24.
La tercera fuerza sería entonces la de Milei, que quedaría con 40 diputados. Ahora solo tiene dos, el propio Milei y Victoria Villarruel, su compañera de fórmula. En caso de que resulten electos como presidente y vice, deberán asumir sus reemplazantes. Pero el dato político es que el futuro bloque de La Libertad Avanza será decisivo para la suerte de las leyes.
Luego seguiría el Frente de Izquierda, que conforme el avance del escrutinio sumaría un diputado en provincia de Buenos Aires y quedaría con cinco. El interbloque Provincias Unidas (integrado por los oficialismos provinciales de Misiones y Río Negro) tendría cuatro, la misma cantidad que el Interbloque Federal, conformado por el schiarettismo, el socialismo y el peronismo bonaerense no kirchnerista.
De todas maneras, es probable que el tablero de la Cámara de Diputados se reconfigure. Uno de los interrogantes en ese sentido es si Unión por la Patria podrá mantener la unidad como bloque o si el kirchnerismo duro, que copó la lista en provincia de Buenos Aires con Máximo Kirchner a la cabeza, se terminará escindiendo de sus socios.
También hay dudas sobre la futura unidad de Juntos por el Cambio, que hoy funciona como un verdadero archipiélago de 11 bloques diferentes, sin un conductor. En ese sentido, una versión que cobra cada vez más fuerza es que Evolución Radical, el espacio referenciado en Martín Lousteau, se reunificaría con la UCR.
Las bancas de Milei
El crecimiento de Milei se explica, en gran parte, por la buena elección en provincia y Ciudad de Buenos Aires. En el principal distrito del país se quedaría con nueve de las 35 bancas en juego, mientras que Unión por la Patria ganaría 13, Juntos por el Cambi, 12; y el Frente de Izquierda, una. En la Capital Federal, de los 12 escaños a repartir, siete irían para Juntos por el Cambio, tres para Unión por la Patria y dos para La Libertad Avanza.
En Córdoba, los libertarios también dieron el “batacazo” y forzarían un escenario estricto de tercios: tres bancas para Milei, tres para el schiarettismo y tres para Juntos por el Cambio. En Mendoza, en tanto, el ganador de las PASO arrasó y obtendría tres de los cinco lugares en juego, quedando los dos restantes para Cambia Mendoza y Unión por la Patria.
Milei también sumaría por primera vez cuatro bancas por Santa Fe, dos por Salta, dos por Tucumán y una por cada una de las siguientes provincias: Chaco, Chubut, Corrientes, Entre Ríos, Formosa, Jujuy, La Rioja, Neuquén, Río Negro, San Juan, San Luis, Santiago del Estero y Tierra del Fuego.
En el Senado
El salto de Milei en el Senado sería brutal: pasaría de no tener ningún representante a quedar con ocho. Esto, gracias a las victorias en Jujuy, La Rioja y San Luis, donde obtendría las dos bancas por la mayoría en cada provincia por haber salido primero, sumadas a dos bancas por la minoría en Formosa y San Juan, donde quedó segundo.
En la Cámara Alta ninguna fuerza tendría, tampoco, el quórum propio, que es de 37 votos. El actual Frente de Todos sería la primera minoría con 31 bancas (la misma cantidad que tiene hoy) y podría sumar tres aliados de los oficialismos de Río Negro y Corrientes, para llegar a 33. Aun así quedaría lejos de la mayoría.
Juntos por el Cambio, que hoy tiene 33 bancas, bajaría a 27 si se repiten los resultados de las PASO, quedando por detrás del peronismo. Ni siquiera sumando a los ocho senadores de Milei alcanzaría los 37.
Por eso, una vez más, la clave estaría en el bloque Unidad Federal, que tendría tres senadores: la puntana Eugenia Catalfamo, que abandonó el Frente de Todos en el verano pero mantiene su sintonía con el kirchnerismo; el correntino Carlos “Camau” Espínola, otro de los que se había ido del bloque; y la schiarettista Alejandra Vigo, que siempre se manejó como opositora.