Economistas y dirigentes de Juntos por el Cambio cuestionaron en duros términos el anuncio del ministro de Economía, Sergio Massa, de encomendar al Banco Central la recompra de bonos de deuda externa por 1000 millones de dólares, con el fin de calmar los mercados ante la escalada del dólar.
El diputado Luciano Laspina, uno de los referentes económicos del PRO, advirtió que “un país sin crédito, obligado a forzar canjes de deuda local con instrumentos que vencen cada seis meses, se da el lujo de precancelar deuda que vence dentro de seis años, con dólares de un Banco Central sin reservas. Una señal inquietante para los pesos que ven marchar su respaldo”.
Otro de los economistas consultados por Juntos por el Cambio, Alfonso Prat-Gay, consideró que la medida “no se entiende”. “¿Acaso los pocos dólares de las reservas no eran ‘para la producción’? ¿Resulta que ahora son para mejorar el riesgo país y los vencimientos... de 2029 o 2030? ¡Faltan siete años para pagarlos!”, aseveró.
El exministro y expresidente del Banco Central agregó: “Esperemos que ningún funcionario haya comprado esos títulos recientemente”.
A su vez, otro exministro, Hernán Lacunza alertó que la decisión significa “más pesos sin respaldo: contener la brecha a riesgo de inflación y tipo de cambio”.
Martín Redrado, una de las últimas incorporaciones al gabinete de Horacio Rodríguez Larreta, señaló que “la medida de recompra de deuda es una reacción que corre detrás del dólar y una apuesta limitada en su monto”, y opinó que “falta el plan integral por sobre las medidas parciales”.
Por su parte, el jefe del interbloque de senadores de Juntos por el Cambio, Alfredo Cornejo, afirmó que “el anuncio de Massa no son ‘buenas noticias’, son manotazos de ahogado de un gobierno que no logra controlar la devaluación. Como no pueden generar crecimiento genuino ni ofrecer expectativas para los inversores, recurren a estas artimañas financieras. Todo es parte del relato”.
Al anunciar la medida desde el Palacio de Hacienda, Massa sostuvo que “traerá beneficios al programa financiero y también al ordenamiento fiscal, porque servirá para continuar bajando el riesgo país y mejorar las posibilidades de las empresas y del Estado de acceder al mercado de capitales”.
El ministro explicó que se trata de “un primer paso muy enfocado en los (bonos) globales, sobre todo en los de corto vencimiento”, entre los que mencionó los de 2029 y 2030.
Desde el Frente de Todos, el diputado Carlos Heller, que preside la Comisión de Presupuesto y Hacienda, destacó la decisión. “Con las expectativas que los mercados generan, los títulos de deuda argentina se venden a un 30% de su valor nominal. El Gobierno, aprovechando cierta situación de mejora de sus reservas, considera que es una buena oportunidad para bajar deuda”, puntualizó.
Heller resaltó que “en los últimos 30 días, estos bonos que ahora va a salir a comprar el Tesoro han subido más del 20%, y ahora, solamente con el anuncio que hizo el ministro, están subiendo 6%, 7%, 8%”.