Agustina Díaz fue la primera en romper el silencio de los involucrados, según la Justicia, en la planificación del intento de asesinato contra Cristina Kirchner. La joven fue liberada en los últimos días y ahora habló por primera vez donde apuntó contra Brenda Uliarte.
La joven obtuvo la excarcelación por parte de la Cámara Federal y ahora señala que tiene miedo después de lo que fue el intento de magnicidio el pasado 1 de septiembre. Pasados dos meses del ataque, Díaz aseguró que pertenece a la “Banda de los Copitos”, como se bautizó al grupo que integraban junto a Uliarte.
“Fui separada de mi familia, fue muy difícil. Lo más complicado fue estar ahí sola”, expresó en la entrevista la chica de 21 años que pasó sus días en prisión en la Unidad 31 de mujeres de la cárcel de Ezeiza. Sin embargo, destacó “a los efectivos del Servicio Penitenciario Federal y de la Policía de Seguridad Aeroportuaria”.
“Quiero mantener mi privacidad. No quiero tener más exposición de la que ya tuve. No me gusta. Tengo un miedo constante de que me pueda llegar a pasar algo. Uno nunca conoce los límites de las personas”, agregó en diálogo con TN la joven que tampoco quiere hablar de su vida privada.
Agustina Díaz sobre Brenda Uliarte: “Nunca le creí lo que me decía, eran delirios”
Díaz se vio comprometida en la causa cuando se encontraron conversaciones junto a Uliarte, donde mencionaba que iba a “mandar a matar a Cristina Kirchner”. Sin embargo, la relación entre ambas viene desde la escuela: “Éramos amigas, ella formó parte de mi vida durante varios años. Nos seguíamos hablando a pesar de no ir más al mismo colegio”, remarcó.
Pero, a la hora de describir el comportamiento de Uliarte, señaló: “Durante los primeros años ella era bastante posesiva conmigo. Le molestaba el hecho de que yo tuviera otras amistades. Me celaba. Con el tiempo, por suerte, eso fue cambiando. Pero quedaba algo de eso. En el último tiempo ella empezó a ir a marchas, a publicar cosas criticando al Gobierno. Eso fue un poco raro. Cuando se trataba de política ella nunca hablaba mucho. Detestaba al peronismo y nada más”.
“Yo creo que lo principal que cambió en su vida fue la muerte de su hijo. Sobre sus otras amistades o sobre con quién se estaba juntando yo no se nada. Ella era muy reservada con ese tema. No sé qué amistades frecuentaba”, describió Díaz.
“Sabía que Brenda era una persona bastante fantasiosa, muy delirante. Yo no le prestaba atención. Nunca creí que esas cosas que decía podían llegar a ser reales. Eran delirios de ella y yo le seguía el juego. Pero nunca le creí. Nunca”, señaló en otro tramo de la entrevista.
“Mucho pero mucho enojo. No quiero saber más nada con ella. No voy a perdonarla ni a hablar con ella de nuevo. No podría hacerlo. Mi vida cambió completamente. De un día para otro mi vida estuvo expuesta para todo el mundo. Yo lo único que hacía era estudiar, ir al gimnasio, ir a comer asado con mis papás y mis abuelos, estar con mi mamá, cuidar de mis ocho gatos. Esa era toda mi vida y de un día para el otro todo cambió. Se me venía todo encima y no lo podía manejar, por momentos. No puedo estar pagando por acciones ajenas. Yo estuve pagando por algo que yo nunca cometí, que yo nunca hice”, concluyó.