El Tribunal de Juicio y Apelaciones de Concepción del Uruguay, condenó este viernes a 17 años de prisión al sacerdote Marcelino Moya, acusado por abuso de menores de edad en una parroquia de Villaguay entre 1992 y 1997, aunque el religioso seguirá libre hasta que la sentencia quede firme.
Los fiscales y la querella habían solicitado ante los jueces María Evangelina Bruzzo, Fabián López Moras y Melisa Ríos, 22 años de cárcel efectiva y prisión preventiva por peligro de fuga.
El cura, que solo presenció la primera de las dos audiencias en que declararon las víctimas, pero no se presentó este viernes, aseguró durante los alegatos que era "inocente" y que los hechos por los que se lo acusó ya habían prescrito.
Los jueces darán a conocer los fundamentos de la sentencia el próximo lunes 15 de abril a las 8.30 horas.
Con la apertura de la causa a finales de junio de 2015, la Iglesia apartó de su función a Moya y le abrió una investigación eclesiástica que aún sigue sin resolución.
Este fue el tercer juicio por abusos a un integrante de la Iglesia Católica en Entre Ríos, luego de que Justo Ilarraz fuese condenado a 25 años en mayo del año pasado; al igual que el párroco Juan Diego Escobar Gaviria en septiembre de 2017.