La concesionaria Aeropuertos del Neuquén SA (ANSA) está invirtiendo 275 millones de pesos en una ambiciosa ampliación. A fin de mes se inaugurará la terminal de vuelos internacionales.
"Estas obras le cambian la cara de acceso a Neuquén y a la Patagonia", aseguró el gobernador Omar Gutiérrez sobre el plan de remodelación del aeropuerto capitalino Presidente Perón. Con esa inversión no sólo dispondrá de nuevas salas de embarque y arribos y dos mangas telescópicas, sino que a fin de mes inaugurará la terminal de vuelos internacionales para los viajes que desde el 4 de octubre unirán esta ciudad con Santiago de Chile.
Los trabajos comenzaron hace unos sesenta días y con un plazo total de diez meses de obras, se espera que estén terminados antes del próximo invierno.
El gobernador detalló que en sector en donde hasta hace poco funcionaba la sala VIP se realizó una remodelación y ampliación para contar con 600 metros cuadrados destinados a las nuevas frecuencias hacia Chile, que con tres semanas de anticipación ya cuentan con la mayoría de los pasajes reservados.
"La concesionaria está invirtiendo cinco millones de pesos adicionales para crear una terminal de pasajeros de vuelos internacionales que es transitoria hasta tanto se terminen el resto de las ampliaciones", explicó Gutiérrez en diálogo con "Río Negro". Y agregó que "hasta tanto se ejecuten las obras definitivas en este sector funcionarán tanto los arribos como partidas internacionales, migraciones, aduana y seguridad", señaló Gutiérrez.
La remodelación y ampliación sustancial, que demandará los restantes 270 millones de pesos, comprende la puesta en funcionamiento de la planta alta del edificio que hasta el momento está cerrada. Allí funcionarán las salas de embarque para los pasajeros de cabotaje y contarán además con baños, locales comerciales e incluso un nuevo sector de confitería.
En la planta baja también se realizarán múltiples cambios que, en conjunto, representan la incorporación de 1.600 metros cuadrados. En esta zona funcionará la sala de preembarque para los vuelos internacionales.
Ambos sectores se vincularán con las dos mangas telescópicas que marcarán que los pasajeros ya no deban pisar la pista de aterrizaje, sino que llegarán a la sala de arribo por medio de pasarelas vidriadas.
Los trabajos se complementan con la puesta en funcionamiento de cuatro nuevos ascensores, la creación de la planta de tratamiento de efluentes cloacales y un nuevo sistema de balizamiento de la pista para mayor seguridad.
“Es una obra de ampliación y refacción con tecnología de última generación que moderniza el aeropuerto facilitando que lleguen nuevas líneas aéreas, más frecuencias y destinos, integrándonos a otras provincias y países pero también promoviendo el desarrollo económico, productivo, comerciales e industrial”, destacó Gutiérrez.