Imágenes recientes muestran que el dispositivo se encuentra en desuso y falto de mantenimiento, con los herrajes de la escotilla de ingreso completamente oxidados y su acceso abierto.
Aunque en el pasado el molino estaba rodeado por un alambrado que impedía el acceso, actualmente la desaparición del mismo permitió actos vandálicos que terminaron con la escotilla abierta y el potencial peligro de accidente que pueda sufrirse en el lugar.
En el interior del molino algunas cajas indican el riesgo de descargas eléctricas, agregando el peligro de rotura por corrosion a causa de sus años frente al mar.
El molino de Sea Energy lleva varios años en desuso, aunque su actual deterioro puede llegar a representar un riesgo mayor.