El Aconcagua es candidato para ser una de las Siete Maravillas Naturales argentinas

Es el pico más alto del mundo después de las montañas que integran el cordón del Himalaya. 

El Aconcagua es candidato para ser una de las Siete Maravillas Naturales argentinas

Mendoza tiene al Cerro Aconcagua como uno de los 28 finalistas que aspiran a convertirse en una de las "7 Maravillas Argentinas" que se darán a conocer el próximo 7 de abril, por un concurso abierto organizado por la Fundación New 7 Wonders, y que comparte con otro destino natural de la provincia, la Laguna del Diamante.

El Aconcagua, con sus 6.962 metros sobre el nivel del mar, es el pico más alto de América, de Occidente y del Hemisferio Sur, y meta de montañistas de distintas partes del mundo.

"Desde lo turístico sería muy importante para el Aconcagua poder convertirse en una de la 7 Maravillas Naturales del país porque entendemos que puede ser una gran promoción para la montaña mendocina en general", dijo el director de Turismo de Las Heras, Guillermo Barletta.

El funcionario del departamento donde se ubica el gigante de América agregó que "es un complemento casi obligatorio para turismo del vino, que actualmente es lo que más identifica al turismo general de la provincia, no solo en el país sino también en el mundo".

Buen comienzo de semana! Te proponemos que este 2019 te animes a realizar una #aventura 😉 Desde #MujeresalaCumbre...

Posted by Mujeres a la Cumbre on Tuesday, March 19, 2019

El Aconcagua es una de las cumbres más buscadas por los montañistas en el circuito de los "sietemil", que por su elevación y sus condiciones geográficas y climáticas constituye el escenario ideal para prepararse para las mayores hazañas deportivas que demandan los "ochomil", que son los picos del Himalaya.

Existen más de 33 variantes de rutas para ascender a la cumbre del cerro, pero las principales son las más utilizadas, como la llamada Ruta Normal (noroeste) por Plaza de Mulas, que es la que se utiliza en el 75% de los ascensos.

También la Ruta del Glaciar de los Polacos, que es de mayor dificultad y es necesario ser un montañista avezado para ascenderla; y la Pared Sur, que es la menos utilizada y la más peligrosa ya que representa un verdadero desafío para los escaladores por sus casi 3.000 metros de desnivel con pendientes de roca y hielo vertical.