El gobierno otorgó un aumento salarial del 17%, en dos cuotas, para policías y penitenciarios y Alfredo Cornejo advirtió que es el "máximo esfuerzo" que el Estado puede realizar. Además aseguró que los sueldos de los miembros de las fuerzas de seguridad están por encima de la media y ante la posibilidad de reclamos, recordó que los agentes no pueden sindicalizarse.
Sin embargo ese incremento (10% desde febrero y 7% a partir de julio) no cayó bien en cierto sector de la Policía.
"El malestar es bastante generalizado sobre todo en la parte de auxiliares, sargentos, cabos", dijo Pablo Fiore, presidente de la Asociación de Ayuda al Policía de Mendoza. "Ni siquiera es un 17%, si lo anualizamos llegamos con suerte a un 11%", agregó en una entrevista con LV10.