Ayer, la Justicia dictó sentencia en una causa iniciada a partir de una denuncia que fue radicada en el 2012. El imputado era Jorge Ceballos, un comerciante chileciteño que tenía varias tiendas de ropa en esa ciudad.
El hecho comenzó cuando una joven de 15 años se escapó de una feria donde era sometida a un trabajo "esclavizante". Tras ello se acercó a una mujer para pedirle auxilio y a partir de allí se conoció el infierno en el que estaba sometida.
Aparentemente, el empresario viajaba a Bolivia, donde reclutaba personas y los esperaba en la frontera argentina para trasladarlos a Chilecito, donde los obligaba a trabajar de una forma inhumana.
La fiscal federal, doctora Virginia Miguel Carmona explicó que "la víctima, de nacionalidad boliviana, trabajó por al menos un año, de lunes a lunes, con horarios de 7:00 a 22:00, sin recibir ningún tipo de remuneración económica y sin tener la posibilidad de salir del lugar donde la tenían encerrada".
Ceballos permaneció prófugo por más de tres años y con orden de captura. En las últimas horas Jorge Ceballos fue condenado a 10 años de prisión y con una multa de 100 mil pesos.
Es la pena más alta que registra la historia judicial riojana por actos de "explotación sexual".